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"Esta es una interpretación simbólica del libro del       "Génesis" 
Con ello no pretendemos crear discusiones. Solo buscamos mostrar el mensaje encerrado detrás de la letra en las escrituras, vista desde un punto de vista espiritual y simbólico...

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"É X O D O    X L"

1.- ENTONCES EL SEÑOR DIOS HABLÓ A MOISÉS DICIENDO:

Nuevos conceptos hacen su entrada en el hombre al interpretar la conversación de Moisés con Dios como entrada de nuevos elementos de conciencia desconocidos hasta ese momento en que aparecen en el género humano.

Cada nuevo grado de conciencia que proviene del VERBO es captado primeramente por un instrumento seleccionado por Dios para ese propósito.

Todo lo que Moisés ha recibido, y su conducta, así como todo lo que le rodea, son las bases de la formación del hombre entrando en su estado de depuración para ser preparado como receptor de los elementos divinos que yacen dormitantes en el VERBO reinante en los ámbitos de la conciencia espacial, listos a ser captados por los instrumentos que toman la frecuencia de estos elementos de conciencia que estando en suspensión espiritual, aguardan a ser implantados en el hombre.

2.- EN EL MES PRIMERO, AL PRIMERO DEL MES, ERIGIRÁS LA HABITACIÓN DEL TABERNÁCULO DE REUNIÓN.-

Vemos que se establece este tiempo como el inicio de este pacto de la ley que encierra dentro de sí el Arca con los diez mandamientos que han de ser los peldaños espiriuales que deberá escalar el pueblo para alcanzar las alturas del espíritu.

No es posible alcanzar las indicaciones del espíritu en tanto el cuerpo sea el que domine las acciones del hombre.


Por eso vemos que este es el inicio de una nueva etapa en la vida del hombre, Primero, vimos como el hombre abandona la servidumbre de la carne simbolizada por la esclavitud en la tierra de Egipto, lo cual es mencionado constantemente como recordatorio de esto mismo.

No es posible llegar al monte Sinaí sin que se abandone primeramente la esclavitud de Egipto. Por supuesto que todo esto es para ser interpretado por todas las generaciones venideras de manera que cumplan con su función de hacer comprensible en la conciencia del ser humano, que antes de escalar las alturas del espíritu, es necesarios dejar atrás los reclamos de la carne.

Esto es precisamente lo que se está estableciendo aquí, ya que se marca como un nuevo año, donde lo primero que hay que hacer es erigir la habitación donde el espíritu del hombre ha de habitar para que sea captado al reunirse en sus límites.

Todo simbólico, ya que paso a paso hemos llegado a este punto en que podemos afirmar todo lo que estamos manifestando como si tuviéramos la certeza de haber escalado las alturas del Sinaí para establecer el acto de la ley que es el que actualmente está vigente y que aún actualmente no ha sido cumplido a cabalidad, ya que hasta que el hombre no llegue a la comprensión de la necesidad de vivir sujeto a estos mandamientos y \os establezca como norma invariable de conducta, no podrá entrar en los límites de la tierra prometida adonde, dicho sea de paso, Moisés no tiene entrada dadas sus limitaciones que no le permitieron contemplarla mas que desde las alturas de este lado del Jordán, esto es igual que todo aquel que sigue sus caminos con la esperanza de poder cruzar el Jordán espiritual de la tierra prometida, donde el hombre ha de alcanzar su verdadera estatura espiritual, sin antes erigir la habitación del testimonio personal.

3.- Y PONDRÁS ALLÍ EL ARCA DEL TESTIMONIO, Y CON EL VELO OCULTARÁS EL ARCA.-

Después de señalada la forma en que se logra abandonar la carne para entrar en el camino de la ley se señalan las conductas necesarias para poner en práctica los mandamientos, colocándolos en el Arca que simboliza al hombre de esa generación, ya que es de madera de acacia, y no de cedro..

Pero los diez mandamientos tendrán, como todas las cosas de la Biblia, dos niveles interpretativos: el literal y el simbólico, siendo por esto que se ordena ocultarla con un velo.

De esta forma no se comprenderá el verdadero significado de ella si no se logra atravesar el velo que la separa de los ojos profanos.

Todos los niveles del entendimiento están señalados claramente por medio de límites y fronteras bien definidos.

Cada forma de pensamiento tiene sus limitaciones. Así se definen claramente todos los pasos de la evolución.

En los días de la creación vimos el patrón a seguir, donde se señala que Dios hizo el mundo en seis días y descanso en el séptimo día llamándolo día de reposo para separarlo de los demás.

De igual manera pudimos ver todos los pasos a seguir, desde Adam hasta el monte Sinaí, con todas sus divisiones bien definidas, y aquí en el Tabernáculo vemos detallados todos los lugares bien definidos colocando los velos y cortinas que los separan.

Todo esto se hace para enseñarle al hombre que el proceso de evolución no es uno sólo, sino que constantemente se están alcanzando nuevos estados y que siempre hay un velo presente con relación al próximo grado a escalar.

Este es el lugar santísimo donde se encuentra el ideal prevaleciente, y que debe ser alcanzado después de eliminar todos los velos o impedimentos emocionales que no permiten ver su legítima forma.

4.- LUEGO METERÁS LA MESA, Y ARREGLARÁS SOBRE ELLA LOS ÓRDENES DE PAN; METERÁS TAMBIÉN EL CANDELABRO, Y ENCENDERÁS SUS LÁMPARAS.-

En el lugar santísimo se colocan los símbolos más destacados de todo el proceso ya que son los que indican con claridad todos los pasos a seguir hacia el mismo.

No cabe duda que el entendimiento y la conciencia son los elementos más importantes para alcanzar a comprender las cosas de Dios y esto se señala por medio de la mesa que tendrá los panes o enseñanzas espirituales que conducen a Dios, así como las luces de los ejemplos más destacados que Dios utiliza para mostrar sus mandamientos.

Esto se nos muestra a través de la lámpara de siete brazos que permanece iluminada perpetuamente mostrando las tablas de la ley que Moisés recibiera de Dios en el monte Sinaí,

Todos estos son pasos de adelantamiento hacia el fin que se persigue y que se muestra en toda la formación del Tabernáculo.

5.- Y COLOCARÁS EL ALTAR DE ORO PARA EL INCIENSO ENFRENTE DEL ARCA DEL TESTIMONIO; Y PONDRÁS LA CORTINA A LA ENTRADA DEL TABERNÁCULO.-

Siguen manifestándose los pasos a seguir, mostrándose los elementos que vimos anteriormente señalados cuando analizamos todos estos componentes del Tabernáculo.

Ahora vemos el altar de oro del incienso, que representa la conducta agradable de los dedicados a señalar los ejemplos a seguir para llegar a Dios.

Esto lo captamos cuando en un pasaje posterior veremos que las oraciones de los santos son como el incienso que sube en olor grato a Dios, siendo, las oraciones, los ejemplos de conducta. Así unimos todos los ejemplos y llegamos a las conclusiones.

Esta es la forma en que se logran las interpretaciones más profundas.

Primero se alcanza entender un símbolo, y después se entiende otro relacionado con el anterior y juntando los dos símbolos se alcanza un tercero más elevado que los resume y que abre rutas para nuevos simbolismos cada vez más avanzados.

Esta es la forma en que ahora, por ejemplo, decimos que el altar de oro para el incienso, corresponde a la conducta de los hombres santos de Dios que resultan agradable olor a santidad.

Por eso está enfrente del Arca del Testimonio, ya que estimula a los que presentan la ofrenda ante Dios, a respirar el olor a santidad que despiden las conductas de los hombres dedicados a Dios, sintiéndose inspirados a seguir estos caminos movidos por su olor.

Volvemos a la separación de los estados del entendimiento de las cosas de Dios una vez más en la colocación de la cortina a la entrada del Tabernáculo.

Con esto se establece la diferencia entre el que viene hacia Dios por temor a Su nombre y hace ofrendas reflejadas, y el que permanece como ejemplo de los demás que viene a buscar su conducta.

Las ofrendas reflejadas son aquellas que no provienen del corazón y se hacen de lo que sobra, dándole la gloria al que la ejerce directamente.

Esto es más entendible si decimos que el sacerdote representa al hombre que no depende de las indicaciones de otros, sino que busca directamente tener su contacto con Dios a través de Su palabra establecida en las escrituras que muestran las conductas y mandamientos ejemplares.

La conducta reflejada es la del que acepta las indicaciones de los interpretes religiosos de sus comunidades, sin ir más allá de lo que estos el indican.

Así podemos ver las dos cortinas, donde una, es para los de conducta reflejada, y la otra para los de conducta directa.

Los primeros no entran dentro de las cosas profundas y luminosas de Dios, en tanto que los segundos alcanzan el contacto íntimo proveniente de las cosas más profundas que están detrás del segundo velo.

6.- Y COLOCARÁS EL ALTAR DEL HOLOCAUSTO DELANTE DE LA ENTRADA DE LA HABITACIÓN, ES DECIR DEL TABERNÁCULO DE REUNIÓN.-

El altar del holocausto no está dentro del lugar santísimo, ya que refleja los ejemplos de los que vienen a mostrar sus debilidades y a pedir la redención de sus culpas, así como para buscar soporte para sus errores por medio de los que señalan las correcciones de sus estados temporales

Tal vez parezca brusca la interpretación que aquí hacemos, pero es necesario destacar la diferencia entre las cosas de la habitación y las cosas del lugar santísimo con el fin de que se establezca la conducta del sacerdote como la definitiva para todos los hombres que deben llegar a ser santos y sacerdotes ante Dios.

Hacemos la aclaración de que al sacerdote señalamos como el común de los sacerdotes de cualquier secta religiosa llámese como se llame, sea cura, rabino, pastor, shamán, guru, etc., sino para señalar la conducta mesiánica como el sumo sacerdote de toda la humanidad.

Por eso se aclara que el altar del holocausto debe estar delante de la entrada de la habitación, ya que ese es el primer paso para alcanzar la entrada del Tabernáculo de Reunión y a la presencia de las cosas santas de Dios.

La fe comienza con el primer intento por conciliar el espíritu con Dios.

Esto nos señala que cualquier forma religiosa está comprendida en este altar del holocausto, ya que por muy simple que parezca la religiosidad de un hombre, en el momento en que hace su ofrenda a una fe, está marcando su entrada hacia el Tabernáculo de Reunión.

Todo intento por alcanzar una relación con Dios, es una ofrenda en el altar de holocausto que está colocado a la entrada del Tabernáculo en el sentido simbólico, ya que ello es una señal de su deseo de estar frente a Dios en la reunión de todo el que entra en su recinto, mostrando en su fe elemental los primeros pasos de la criatura espiritual que nace al conjuro de la ofrenda.

7 Y COLOCARÁS LA FUENTE ENTRE EL TABERNÁCULO DE REUNIÓN Y EL ALTAR Y ECHARÁS AGUA EN ELLA.-

Ahora vemos la colocación de la fuente para las aguas entre el Tabernáculo de Reunión y el Altar. En aquella ocasión vimos que éste simbolizaba el lavatorio que era necesario efectuar con relación al espíritu para poder entrar en el Altar.

Ahora en la revisión vemos que la fuente simboliza lo que el río Jordán como símbolo de la limpieza que hay que hacerse antes de penetrar en la tierra santa para lavar todas las influencias d que se traen del mundo.

Este simbolismo está entre el Tabernáculo de Reunión y el Altar, para dar a entender que por el hecho de entrar en el Tabernáculo de Reunión no se ha alcanzado la purificación del espíritu, ya que para acercarse al Altar, deberán lavar todos los polvos del camino, o sea, las influencias del Adam anterior, para presentar las ofrendas a Dios, o sea los ejemplos de conducta con la limpieza de las aguas vivas que simbolizan el Jordán, así como la fuente frente al altar

8.- LUEGO PONDRÁS EL ATRIO ALREDEDOR DEL TABERNÁCULO Y COLOCARÁS LA CORTINA A LA PUERTA DEL ATRIO.-

Cuando el hombre decide entrar en un nuevo ideal, necesita tener la seguridad preliminar que le permita sentirse seguro del paso que está dando, esta seguridad está simbolizada en el atrio que aquí se presenta y que vimos detallado cuando analizamos el capítulo 27 versículos 9-19.

En esa ocasión vimos todos los detalles de su confección y aquí vemos puesta en práctica todas las indicaciones, que son la misión de los hombres sabios de corazón que vimos anteriormente seleccionados por Dios para mostrar su obra.

Cada uno de los pasos en la fabricación del Tabernáculo muestra la confirmación de los hechos, y la comprobación de que los planes de Dios se han desarrollado a cabalidad en la misma medida en que Él lo ha ordenado.

Todas las repeticiones que se hacen al respecto, son hechas precisamente para mostrar que todo cuanto Dios establece se lleva a cabo.

Este es el principio de la fe, ya que vemos plasmados los planes de Dios para el hombre aun en sus más pequeños detalles.

Vemos otra cortina. Siempre hay una separación entre un estado y el otro de manera que todo quede encerrado dentro de unos límites.

De esta forma podemos decir que no puede haber confusión entre las distintas formas de proceder el hombre, ya que cada una de ellas está limitada, y para atravesar de una a otra, hay que descorrer un velo o pasar una cortina.

La diferencia entre un velo y una cortina, es que la cortina establece separaciones, pero puede pasarse de un lado a otro a voluntad del hombre, mientras que el velo establece incógnitas que sólo pueden descorrerse de acuerdo con la voluntad de Dios, y siguiendo los principios establecidos para ese propósito de acuerdo con sus planes.

De manera que a la puerta del atrio hay una cortina, o sea limita la entrada a las cosas de Dios, pero es accesible a la voluntad del hombre y éste puede entrar a los inicios de la fe y a la seguridad de una forma religiosa con sólo acercarse a la misma.

9.- ENTONCES TOMARÁS EL ACEITE DE LA UNCIÓN Y UNGIRÁS LA HABITACIÓN Y TODO LO QUE HUBIERE EN ELLA; ASÍ LO SANTIFICARÁS CON TODOS SUS UTENSILIOS PARA QUE SEAN SANTOS.-

El aceite de la unción, representando la reunión de los ejemplos más edificantes y renovantes, así como los conocimientos más elevados con relación a la luz del Altísimo, sirven para señalar lo que verdaderamente pertenece al ideal que se persigue.

Al decir que se santifican las cosas por medio del aceite de la unción, está dando a entender que se le certifica como parte del proceso que el Altar representa.

Por eso vemos que aquí se ordena la santificación de todo lo relacionado con el interior del Tabernáculo, certificando que una vez que el hombre penetra en los caminos de Dios, que simboliza el Tabernáculo, su conducta empieza a santificarse con el contacto de las cosas que allí se encuentran.

Para que el hombre pueda verdaderamente elevarse en el sentido espiritual, es necesario que entre en contacto con las cosas del santuario, o sea, que dé los primeros pasos de la fe y atraviese el atrio que simboliza la fe más elemental que pueda cobijar los temores que éste tiene.

La función primordial que vimos establecida para los que buscan a Dios, es la de llegar a ser santos. Vimos que llegar a ser santo representa el momento en que se está plenamente entregado al ideal que la conciencia de cada cual le dicte, ya que la conciencia representa la medida de Dios que cada cual lleva en sí.

El hálito de vida que Dios insufló al hombre es precisamente eso, el hecho de tener una conciencia o sentido de lo justo como parte de la justicia divina en su proceso de manifestación.

Esta justicia divina tiene sus efectos evolutivos a través de la conciencia humana, donde cada nivel tiene una medida de lo justo para balancear equitativamente la medida de lo injusto que es lo que establece el equilibrio de lo perfecto. Lo perfecto está basado en el estar pleno de todo, sin faltarle nada. Para ello debe mostrarse como una balanza, donde cada peso tiene su contrapeso.

El llegar a ser santo, establece el cumplimiento del deber en todas sus partes.

Así, al santificar todo lo que se halle en la habitación, le da un carácter de contar con todos los elementos necesarios para cumplir con su misión.

10.- UNGIRÁS TAMBIÉN EL ALTAR DEL HOLOCAUSTO CON TODOS SUS UTENSILIOS; ASÍ TAMBIÉN SANTIFICARÁS EL ALTAR, PARA QUE SEA EL ALTAR COSA SANTÍSIMA.-

El Altar lo vimos como los ejemplos que se dedican para la realización de un propósito ideal.

En él se plasma la realización de los conceptos ideales en su máxima expresión.

De manera que el realizar esta conducta ideal a su grado supremo es parte del proceso que deberá santificarse por medio del conocimiento de las cosas más avanzadas de Dios, simbolizado por el aceite de la unción.

Vimos también que estos utensilios son los métodos que se emplean para lograr un propósito.

De esta forma, al llegar a la parte funcional que aquí vemos representándose, podemos decir que todos los medios que se empleen para alcanzar un ideal, son válidos, ya que la santificación de todos los utensilios del Altar nos sugiere que esto es así partiendo de la base de que toda ayuda que se utilice para llevar a cabo el holocausto ante el Altar, que es el ideal que se persigue, estará santificada por los ejemplos que se presentarán con respecto a ese holocausto o dedicación ideal.

Debemos entender primeramente que todas las acciones del hombre están encaminadas a manifestar la obra de Dios o su gloria esplendente.

Con esto se da a entender que no importa lo que el hombre haga, ni el sentido en que éste actúe, toda su obra es para mostrar su condición como tal, y obrar en perfecto acuerdo con el plan de Dios.

Esta concepción pertenece al lugar que se halla detrás del velo del lugar santísimo, ya que muestra la perfección de Dios, donde lo justo, así como lo injusto, sólo sirven para mostrar el perfecto equilibrio de la balanza divina donde se pesa todo lo perfecto.

Esto está regulado por la conciencia, que es el resultado de todas las circunstancias que Dios propicia para la formación específica de cada conciencia, señalándole al hombre el lugar de su habitación, así como la influencia de los hechos que le rodean.

Todo está confirmado por medio de la unción de todo lo relacionado con la habitación así como los utensilios y el Altar del holocausto, donde nada queda fuera que no sea cosa santísima.

Si algo no fuera ungido, no sería considerado santo o aceptable para el propósito que Dios señala, ya que la santidad es la participación de las cosas perfectas de Dios en su medida, y no en la medida del hombre que no está apto para juzgar las cosas más avanzadas que permanecen detrás del velo.

11.- ASIMISMO UNGIRÁS LA FUENTE Y SU BASE, YA ASÍ LA SANTIFICARÁS.-

La unción señala el pertenecer a un propósito, estar adherido a una causa.

De esta forma el ungir la fuente y la base hace que sean partícipes del propósito fundamental que se persigue en el simbolismo del Tabernáculo. La fuente y la base simbolizan las depuraciones de los errores, ya que la fuente contiene las aguas de purificación antes de mostrarse en presencia del ideal perseguido.

Esta fuente y su base tienen como objeto señalar lo obsoleto con relación al estado que se sustenta en el momento en que se va a hacer entrada a un nuevo grado o estado de perfección. Al atarla o uncirla se considera como perfecto o santo en este sentido.

Podemos decir que es imposible entrar en el nuevo estado sin antes proceder a lavar las obsolescencias del anterior, ya que se contaminarían las cosas nuevas con las viejas, perdiéndose los nuevos conceptos ideales al estar velados por los antiguos que ya no están vigentes.

Esto parece un contrasentido, pero debemos entender que no hay un solo detalle que quede suelto en este proceso de perfección al que asiste el hombre. Cada entrada al Tabernáculo, que es el ideal de perfección, tiene que estar precedida por un lavatorio de las impurezas de los grados anteriores, De ahí la fuente y la base a la entrada del Tabernáculo, indicando que hay que depurarse antes de alcanzar un nuevo estado de comprensión de las cosas de Dios.

12.- ENSEGUIDA HARÁS QUE SE PRESENTEN AARÓN Y SUS HIJOS A LA ENTRADA DEL TABERNÁCULO DE REUNIÓN Y LOS LAVARÁS CON AGUA.-

De esta forma los intérpretes de los conceptos ideales de este nuevo pacto que Moisés representa en este estado, son renovados en sus concepciones.

Aarón y sus hijos que son las distintas formas religiosas que han surgido de las escrituras, ya que ellos son la lengua que Moisés obtuvo cuando manifestó su imposibilidad de hacerse entendible por los participantes de aquellos miembros de menor conocimiento que el que él sostenía en su ministerio (Ex 4:10) diciendo: es que soy torpe de lengua y en (Ex 4:15) la respuesta es Tú pues hablarás a él (refiriéndose a Faraón, o el mundo) y pondrás las palabras en su boca.

Como ellos se encargan de transmitir las palabras de ese pacto de la ley a los seguidores de la congregación, tienen que primeramente lavar las impurezas de ellos que traen de otros grados anteriores, siendo lavados con las aguas que hay en la fuente y su base, pertenecientes al propósito que se persigue, ya que han sido uncidas al mismo por medio del aceite de la unción, que dijimos representa la luz del espíritu de santidad de los ejemplos de Dios.

Vemos que se ordena hacer esto a la entrada del Tabernáculo de Reunión, y no dentro del mismo, por lo que podemos entender que las depuraciones no se producen una vez emprendido el nuevo camino, sino que es necesario desprenderse de los viejos rudimentos antes de entrar en los nuevos predios de la alturas que han de alcanzarse dentro del Tabernáculo.

En pocas palabras: antes de tomar lo nuevo hay que despojarse de lo viejo.

13.- LUEGO VESTIRÁS A AARÓN CON LAS VESTIDURAS SANTAS, Y LE UNGIRÁS, Y LE SANTIFICARÁS, PARA QUE SEA MI SACERDOTE.-

Las vestiduras son las características externas de quienes cubren sus faltas y errores o muestran su condición de puros, cuando las vestiduras son de lino fino blanco, por supuesto en el sentido simbólico.
  • Y fueron abiertos los ojos de entrambos y conocieron que estaban desnudos (Gen 2:7) ¿Quién te ha dicho que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol del mal del cual yo te mandé que no comieses? (Gen 2:11) E hizo el Señor Dios para Adam y su mujer túnicas de pieles y los vistió (Gen 2:21)
De esta forma vemos como las vestiduras cubren las faltas, impidiendo que se vea la desnudez de los errores cometidos.

Así podemos decir que simbólicamente estas vestiduras serán las interpretaciones que las religiones utilizarán para oficiar su ministerio, cubriendo las faltas y su desnudez espiritual de acuerdo con su nivel en lo que respecta al Tabernáculo de Reunión, que representa el proceso evolutivo del espíritu hacia su perfección.

También se le ha de ungir, o uncir, quedando atado al significado del Tabernáculo.
La santificación representa la manera exacta de hacer las cosas de acuerdo con un propósito ideal. Es la pureza de actuación basada en un proyecto definido sin mezcla de ninguna clase que impida ver su contenido nítidamente.
  • Mira, yo te he constituido dios para el faraón, y tu hermano Aarón será tu profeta (Éxodo 7:1)
Así, la religión, representada en la figura de Aarón, será la representación del grado intermedio entre un estado y el otro.

Vimos que Moisés representaba un grado espiritual superior con relación al hombre en esa escala y que era imposible la comunicación entre él y los de los estados inferiores a quienes debía evolucionar por medio del pacto de la ley que le fue adjudicado como guía para su grey. Por eso dice que no podían mirar su rostro por lo luminoso.

Por ello se seleccionó a Aarón como intermediario o mensajero pudiendo decirse que el sacerdote representa la comunicación o intercesión entre los grados superiores y los inferiores.

Así vemos que el pueblo de Israel (los hombres que buscan a Dios en el Espíritu) tiene la función de ser sacerdotes y gente santa (Ex 19:6)

Dada esta compilación podemos decir que Aarón representa al pueblo de Israel en el sentido literal, y a las religiones en general en el sentido simbólico; y que el Tabernáculo de Reunión es el ideal del hombre de Dios que debe ser mostrado en el mundo para transformación de lo transitorio en inmutable, cambiando lo finito en infinito.

De esta forma Moisés representa la figura mesiánica en este estado.

El propósito real de todo esto permanece detrás del velo aguardando la santificación al final de los tiempos, cuando el velo será eliminado para mostrar la luz radiante del Señor de la luces en su máximo esplendor.

Todas estas figuras las vemos mostradas poéticamente en los profetas,
  • El sol no será más tu luz de día, ni para resplandor te dará la luna su luz; porque el Señor mismo será tu luz eterna (Is 60:19) Y tu pueblo, todos ellos justos, heredarán para siempre la tierra; renuevos plantados por mí mismo (Is 60: 21)
14.- DESPUÉS HARÁS QUE SUS HIJOS SE PRESENTEN, Y LOS VESTIRÁS DE TÚNICAS.-

En la misma forma en que Aarón representa a Israel como sacerdote de las naciones de la tierra, las religiones resultantes de esta génesis espiritual servirán de sacerdotes para los grados inferiores que hayan de irse manifestando con relación al final de los tiempos.

Por eso, los hijos de Aarón son investidos con las túnicas sacerdotales. Ellos representan el conjunto de manifestaciones religiosas que en el futuro oficiarán el pacto que aquí se señala por medio de Moisés como luminaria de ese día. Aarón será entonces la luna reflejada de esta luz.

Lo mismo ocurre con la manifestación mesiánica, donde el Mesías es la luz del día y Moisés es la luna, reflejo de esa luz.

Así vemos como las imágenes parabólicas se van haciendo visibles por medio de la compilación de los versículos que van siendo colocados en los seguidores de este ideal. Cada uno de los personajes de la Biblia tiene la misión de llevar una partícula de VERBO en su actuación de manera que forme las escrituras que el Señor Dios presenta ante el hombre por medio de Sus elegidos.

Vimos que los hombres sabios de corazón son los encargados de llevar a cabo las obras del Tabernáculo, siendo representantes transmisores de estos símbolos para interpretaciones futuras.

En el Tabernáculo vemos representado el árbol de la vida que vivificará las naciones de la tierra siendo Aarón una de las ramas de ese Árbol de vida, del cual Moisés es el tronco asido a la raíz santa que es el Espíritu Santo o figura mesiánica según el orden de Melchisedech.
  • Porque la viña del Señor Dios de los ejércitos es la casa de Israel, y los hombres de Judá son la planta de su deleite. (Is 5:7)
Todas estas metáforas muestran la conexión existente entre todas las partes de estas escrituras, que aunque redactadas durante siglos de existencia del hombre, se muestran como una unidad elaborada literalmente como la obra de un solo autor colocando ordenadamente la representación de Su obra para manifestación de Su gloria al cabo de los tiempos.

Ciertamente mil años delante de tus ojos
son como el día de ayer, que pasó,
y como una de las vigilias de la noche.
(Salmos 90:4)

15.- Y LOS UNGIRÁS COMO UNGISTE A SU PADRE, PARA QUE SEAN MIS SACERDOTES; ASÍ HA DE HACERSE, PARA QUE SU UNCIÓN LES SEA POR SEÑAL DE UN SACERDOCIO PERDURABLE, DURANTE SUS GENERACIONES.

Al continuar la evolución del género humano su marcha invariable, vemos que los grados de comprensión del misterio se van produciendo uno tras otro.

Así, los hijos de Aarón representan los movimientos religiosos que se desprendieron de las primeras interpretaciones al respecto.

Estas nuevas interpretaciones, que han de irse produciendo con el paso de los años, también estarán ungidas, o uncidas al mismo propósito inicial que se persigue con la fabricación del Tabernáculo de Reunión.

Con el correr de los siglos podemos ir viendo los cambios en las distintas religiones que se han formado de la interpretación de las escrituras. Nuevas formas de ver a Dios han ido surgiendo y las viejas tradiciones han ido dando paso a nuevas maneras de adorar a Dios más acorde con la necesidad del hombre en su adelantamiento espiritual e intelectual.

Viejos temores han ido dejando de tener vigencia debido al conocimiento de los misterios de la naturaleza que han ido dejando de serlos para mostrar la magnificencia de la obra de Dios a través de la ciencia encaminada a analizar las profundidades del mundo inconmensurable que el hombre presencia transcurrir delante de él con infinitas proporciones imponderables por su esplendor y magnificencia.

La señal que hemos visto en todo, derivado del sacerdocio de Aarón es la unidad que se manifiesta en el orden espiritual, o sea en el fondo de todas las sectas, que aunque materialmente estén separadas y combatan entre sí llegando hasta las guerras y confrontaciones de todas clases, no pueden eludir la responsabilidad que las unce al propósito original, que son la instauración de los mandamientos grabados en piedra, que son el centro y motivo de todo Tabernáculo.

Como la unción es la representación de la luz que se desprende de Dios hacia los hombres por medio de los ejemplos que Éste les ha mostrado, esa unción permanece en todas las religiones aguardando ser manifestada y cumplida por los seguidores de las mismas.

Esa es la señal perpetua que permanece durante las generaciones sacerdotales, que como los hijos de Aarón, deberán tener la unción del Espíritu Santo que brota del Arca como luz inextinguible señalada para perpetuidad.

16.- Y LO HIZO ASÍ MOISÉS; CONFORME A TODO LO QUE EL SEÑOR DIOS EL HABÍA MANDADO ASÍ LO HIZO.-

La misión de Moisés ha tenido frutos espirituales a través de los siglos, ya que el objetivo fundamental de la creación del Tabernáculo de Reunión ha persistido.

Día a día son más los que reciben las mismas indicaciones que en aquella ocasión recibieran los hijos de Israel en el orden material, y que hoy reciben todos los hijos de Israel según el orden espiritual.

Ahora las fronteras de la tierra prometida se han extendido a todos los rincones de la tierra y donde quiera que haya alguien que sea engendrado espiritualmente por estos conceptos nacidos de aquella Arca conteniendo los diez mandamientos de Dios, puede decir que nació como hijo del Espíritu de santidad que creó a los hijos de Israel.

Primero carnalmente a través de Jacob y después espiritualmente por medio del nuevo nombre que éste obtuvo por luchar contra el hombre y venderlo para ser transmisor de la promesa hecha a Abraham a todas las naciones de la tierra.

Por eso vemos que aquí se anuncia proféticamente los resultados de la obra de Moisés, que vemos sí fue hecha conforme a todo lo que el Señor Dios le había mandado hacer.

17.- ACONTECIÓ PUES EN EL PRIMERO DEL SEGUNDO AÑO, AL PRIMERO DEL MES, QUE FUE ERIGIDA LA HABITACIÓN.-

Esto señala la celebración de la pascua en su segundo nivel, ya que un nuevo año comienza y ello simboliza una nueva etapa con todos los acontecimientos que encierra el simbolismo del año inmaterialmente.

Al decir inmaterialmente estamos queriendo decir, fuera de los límites de la materia y sus consecuencias, donde las medidas de tiempo no son de naturaleza humana, sino de índole divina, de acuerdo con la etapa de luz y sombra que Dios transcurre sobre su obra.

Por eso, cuando vemos las fechas y los límites de tiempo debemos interpretarlos como medidas fuera de esta naturaleza, donde un día para Dios puede representar miles o millones de años para el hombre en su escasa percepción del alcance de la naturaleza divina.

Esto quiere decir que la erección de la habitación en este sentido, no fue sino hasta el segundo nivel, anunciando al hombre la necesidad de atravesar primeramente por todos los pasos espirituales que atravesó el pueblo de Israel materialmente, o sea, que debe reproducirse la salida de Egipto espiritualmente, con el abandono de la esclavitud de las cosas de la carne, llegar al vacío doctrinal que simboliza el desierto, recibir los impulsos de la fe, y toda la trayectoria que hemos visto manifestada literalmente en las escrituras, y que será atravesada una y otra vez por el género humano, hasta que se reciba la unción que el Tabernáculo guarda para todos los que acuden espiritualmente, año tras año, a recibir la unción que se desprende del mismo en su forma simbólica.

18.- Y MOISÉS ERIGIÓ LA HABITACIÓN, Y COLOCÓ SUS BASAS, Y PUSO SUS TABLONES, Y METIÓ SUS TRAVESAÑOS, Y LEVANTÓ SUS COLUMNAS.-

Entonces comenzó el nuevo pacto que Moisés representa. El primer pacto lo representaba la promesa de Abraham cuando se le dijo que de él saldría la semilla que heredaría la tierra prometida siendo padre de las naciones de la tierra. Entonces fue la fe la que se estableció.


Por medio de la fe se introdujo la necesidad de buscar el nivel que el espíritu necesitaba para su manifestación ya que encerrado en su condición carnal, no podía manifestarse plenamente.

En el pacto de la circuncisión se libera la condición engendrante. Sara pudo germinar la semilla de la raíz santa por medio de Isaac, que tras la visita de los ángeles de Dios, terminaron su esterilidad y tuvo a Isaac, del cual saldría Jacob, convertido posteriormente en Israel.

Este es el primer paso que representa la concepción, o sea que se concibe la fe o esperanza de un futuro mejor y nace el ideal de la tierra prometida en la promesa de Abraham, sueño ideal que eleva al hombre hacia las alturas del espíritu.

Ahora en Moisés, surge el segundo paso, que es la puesta en práctica de ese ideal, manifestándose el medio de alcanzar este propósito surgiendo el pacto de la ley que eliminará los errores o imperfecciones de la carne manifestándose el pecado o lo que NO debe hacerse.

Esto deja abierto claramente el camino hacia el nuevo nivel que se señala como la tierra prometida o la manera de ver las cosas por medio de la luz directa que viene de Dios. En este punto vemos como el segundo paso está siendo presentado por medio de símbolos que servirán de guía para las generaciones venideras de cómo alcanzar la promesa.

Esto es precisamente el Tabernáculo, la guía de los caminos a seguir para lograr el propósito. Es el espíritu del hombre en acción moviendo a sus células espirituales.

La habitación es el inicio de este recorrido, donde todos los elementos como vimos con anterioridad, tienen un significado simbólico, además del propósito literal del mismo.

Las basas y sus tablones son los fundamentos de estos nuevos niveles, señalando su estabilidad y firmeza por medio de las columnas que sostienen la cobertura que estará sujeta a toda la habitación.

Este es un cuadro simbólico de la historia del HOMBRE visto en fragmentos metafóricos que se repiten una y otra vez mostrando el recorrido que tiene que hacer el hombre para llegar a la verdadera tierra prometida, que no es una tierra físicamente hablando, sino una porción del espíritu que se halla en esencia aguardando ser manifestada por el hombre para llegar a ser a imagen y semejanza de Dios.

Paso a paso irán manifestándose todos los elementos para la formación de este plano de actuaciones que mostrarán la ruta hacia el paraíso o tierra espiritual, yaciente en el espíritu.

19.- LUEGO EXTENDIÓ EL TABERNÁCULO POR ENCIMA DE LA HABITACIÓN Y PUSO LA CUBIERTA DEL TABERNÁCULO ENCIMA DE ÉSTE, POR LA PARTE DE ARRIBA; COMO EL SEÑOR DIOS HABÍA MANDADO A MOISÉS.-

Sobre estos cimientos se colocaron los fundamentos del nuevo orden, señalándose el propósito ideal del mismo por encima de las condiciones existentes para su realización.

Esto quiere decir que el fin es más importante que los medios en el sentido de Dios, aunque en el sentido del hombre, los medios son los que conducen al fin esperado.

De esta manera se da a entender que la importancia de todo el proceso no está en la exaltación de Dios como fuerte y poderoso, sino en mostrar la importancia de enseñar al hombre su camino para perfección de sus caminos.

Por eso la figura central de todo el Tabernáculo está representada por el Arca donde se encuentran las tablas de la ley, y no para la adoración a Dios, como es la creencia popular.

Todas las leyes y decretos están encaminados a mejorar la conducta del hombre y ninguno a exaltar la grandeza de Dios.

Este Tabernáculo no es para decirle a Dios lo maravilloso y poderoso que Él es, ni para alabar su esplendente figura, sino para alcanzar los dictados de Su palabra como fuente de Agua Viva para las almas sedientas que acuden al mismo.

Los libros que componen todos estos pasos iniciales del proceso que se llamó la Torah, muestra en su nombre del hebreo el propósito que se persigue. Torah se traduce como Aguas para Vida ya que está encaminada a lavar nuestros pecados y errores por medio de sus aguas vivas en acción inmanifiesta..

Por eso vemos que todos los preparativos y la detallada minuciosidad de todos los elementos componentes persiguen un solo objetivo, destacar las tablas de la ley como centro de todo el proceso, colocándose dentro del Arca y poniéndola detrás del velo.

No como una figura mágica de poderes ocultos que irradie efluvios misteriosos dándole una condición especial a los que traigan ofrendas materiales y las presenten a los pies de la misma, sino para que se comprenda que es necesario atravesar los velos de la ignorancia para llegar hasta las tablas y leerlas; colocando en el corazón el significado de las palabras que en ella hay, que es lo mágico y prodigioso de todo el Tabernáculo.

Por medio de estas palabras se logra todo el poder que Dios otorga al hombre para alcanzar la tierra prometida y poder para matar los errores de la conducta influenciada por la carne, simbolizado por los habitantes de la tierra que aquí se manifiesta como la tierra del cananeo, el amorreo, el perezco, el filisteo, etc.

20.- ENSEGUIDA TOMÓ LAS TABLAS DEL TESTIMONIO Y LAS PUSO DENTRO DEL ARCA, Y PUSO LAS VARAS AL ARCA, Y COLOCÓ EL PROPICIATORIO POR LA PARTE DE ARRIBA.-

Así se procedió a colocar el objetivo fundamental de toda la fabricación en el Arca, que era hecha de madera de acacia, señalando así la relación del hombre con la misma.

Todavía hoy, después de tantos siglos, el hombre fabrica sus modelos del Tabernáculo para alabar la figura de Dios como centro de su fabricación, cuando vemos aquí claramente señalado el propósito del mismo, como el lugar de reunión para prepararse para poder penetrar los velos que separan al hombre del pacto que debe cumplir antes de alcanzar la tierra prometida.

El acudir al Tabernáculo no determina la función del mismo, sino que todo debe estar hecho de tal manera que el centro del mismo no sea la figura de ningún símbolo mágico que deba adorarse, como es la naturaleza del hombre que busca poderes para su seguridad, sino para comprender que hay una llave de entrada a mejores condiciones para su espíritu, y que este Tabernáculo tiene las palabras que Dios le otorgó al hombre para su elevación a las alturas del monte de Su Santidad, donde ha de manifestarse como imagen y semejanza de Su Creador.

Así vemos que el propiciatorio, está encima del Arca que contiene las palabras del nuevo pacto.

Con esto nos señala la propiciación o posibilidad de alcanzar estas palabras que están cubiertas por la sombra de Dios, en el símbolo del propiciatorio.

Este símbolo nos señala la presencia de Dios para analizar la conducta del hombre, que se hace manifiesta como las ofrendas que éste presenta ante el altar de holocaustos, mostrando en las mismas su condición espiritual..

El acudir al Tabernáculo lleva como propósito definitivo aprender la palabra que Dios le otorgó al hombre por medio de Sus elegidos.

21.- LUEGO METIÓ EL ARCA DENTRO DE LA HABITACIÓN, Y PUSO EN SU LUGAR EL VELO DE LA CORTINA, Y OCULTÓ EL ARCA DEL TESTIMONIO COMO EL SEÑOR DIOS HABÍA MANDADO A MOISÉS.-

Al colocar el Arca dentro de la habitación puso inmediatamente el velo, como dando a entender que era un lugar reservado al cual no se podía entrar sin antes pasar por la condición apropiada para ello por medio de los requisitos que ya conocimos cuando analizamos detalladamente la función de los sacerdotes, y cuando dijimos que esta era la función que en definitiva deberían tener los hijos de Israel, ya que era una nación de gente santa y sacerdotes.

El ocultar el Arca tiene su significado de una manera verdaderamente profunda, ya que de esta manera se le da un carácter de sagrado que estimula al hombre a la preservación de la misma.

De no haber tenido la condición de sagrados que se le presentó tal vez no le hubiera dado el sabor mágico que el hombre necesita para seguir un propósito con verdadero interés. Además que no haría que fuera un símbolo de algo a alcanzar a través de la incógnita que la idea de Dios representa para la humanidad en general.

Al ocultar el Arca del testimonio, la preservaba para generaciones futuras que sabrían entender su significado, ya que al estar al alcance de manos profanas, le restarían el valor que las mismas representan en realidad.

Esto sería, perdonando la comparación, como poner un anillo de oro en el hocico del cerdo, como indica uno de los proverbios como señalando la inutilidad de colocar algo de valor en posesión de quien no conoce el precio de ello.

Por eso, las indicaciones de Dios para Moisés, las cuales éste cumplió al pie de la letra, eran para preservación de todos los tesoros que el Tabernáculo guardaba para la conciencia humana.

Todavía hoy vemos lo que sucede cuando la ley cae en manos impropias y se pone al alcance de los que no la entienden.

Así como vemos lo que ocurre con los templos y santuarios que se han convertido en centros de petición y banco de milagros tratando de alcanzar lo que no se puede producir por medio de una contemplación estática de las mismas palabras que Moisés colocó en el Arca y que cubrió con el mismo velo de ignorancia que aún hoy perdura y aguarda ser develado, como una circuncisión en el corazón de los hombres que acuden al lugar de reunión que aquí vemos presentado por Moisés para el resto de la humanidad a través de sus sacerdotes, los hijos de Israel en el Espíritu.

22.- LUEGO COLOCÓ LA MESA DENTRO DEL TABERNÁCULO DE REUNIÓN, AL COSTADO SEPTENTRIONAL DE LA HABITACIÓN FUERA DEL VELO.-

Una vez colocada el Arca con las tablas de la ley, lo cual es el elemento central y el más importante de todos, se procedió a preparar las condiciones para tomar y aprender las cosas espirituales que allí se iban a representar.

Para ello se colocó la mesa de la proposición, que simbolizaba el aprendizaje espiritual, y los elementos de conocimiento que el hombre ha de ir presentando a la idea de Dios.

Esto lo interpretamos así por dos razones:
  1. 1. Porque en ella se colocan los panes que se le proponen a Dios. Esto representa el conocimiento definitivo de las cosas que el hombre dejará como ejemplo de esta nueva conducta; además de las acciones que se le dedican a Dios para ofrendas.
  2. 2. Por estar colocada al lado septentrional, Esto la identifica con el error y las indiferencias por medio de las señales de los profetas que muestran el norte como lo negativo que se avecina.
Porque del norte viene una humareda (IS 4:31)
Entonces el Señor me dijo: Del norte estallará el mal sobre todos los habitantes de la tierra, (Jer 1:14)
Huid por salvaros, no os detengáis, porque voy a traer un mal desde el norte y gran destrucción. (Jer 4:6)
He aquí que al norte de la puerta del Altar estaba aquella imagen de los celos a la entrada. (EZ 8:5)

En infinidad de ocasiones se asocia el tormento con el septentrión, que es el norte, el lugar de donde provienen todos los sufrimientos y tribulaciones.

Estos son el pan espiritual propicio para aprendizaje de las cosas del espíritu.

El dolor enseña, el placer pervierte.

Por eso están colocados en la mesa de la propiciación.

Por ello se encuentra fuera del velo, ya que una vez atravesado el velo, y llegado al Arca para alcanzar las tablas del pacto, todo esto quedará atrás por medio de lo establecido en dichas tablas.

Toda esta interpretación sirve para establecer una parábola entre los hechos literales que se muestran en las escrituras y el proceso de aprendizaje y encuentro con Dios de cada hombre que acude a la Biblia en busca de caminos para acercarse a Dios y elevar su espíritu a las alturas del SER.

23.- Y ARREGLÓ SOBRE ELLA LOS ÓRDENES DE PAN DELANTE DEL SEÑOR DIOS, COMO EL SEÑOR DIOS HABÍA MANDADO A MOISÉS.-

Así se establece el orden en que se colocará el pan para ir alimentando el espíritu de quien lo toma como alimento espiritual personal.

Este es el pan que el rey David, símbolo de la figura mesiánica en el hombre de la ley, tomó cuando era perseguido por el rey Saúl, símbolo del hombre exterior o superficial en su conducta hacia Dios.

Saúl fue seleccionado rey de Israel, solo por su figura externa, en tanto que David lo fue tras la muerte de Goliat, símbolo de la conducta carnal en el hombre.

Este pan de la proposición siempre deberá estar presente ante el altar, ya que de esta forma la nutrición del espíritu del hombre no se detiene, sino que siempre está propuesto delante de Dios para crecimiento de Su obra en el orden espiritual.

Todos los símbolos están siendo cumplidos por Moisés, dejando asentado para la posteridad todos los componentes del Tabernáculo que servirá para las interpretaciones de las generaciones futuras que le precederán.

Hoy podemos decir que la mesa de la proposición, es la conducta de todos aquellos que de una forma u otra, contribuyen al crecimiento de la obra de Dios, brindando su aporte ejemplar en este sentido.

24.- LUEGO PUSO EL CANDELABRO DENTRO DEL TABERNÁCULO DE REUNIÓN FRENTE A LA MESA, AL COSTADO MERIDIONAL DE LA HABITACIÓN.-

Este es el otro elemento con que se combate el error.

El candelabro representa la figura o símbolo de los ejemplos más destacados de la conducta a seguir para alcanzar la luz del Espíritu Santo de Dios.

Ellos iluminan el Altar mostrando el camino hacia la realización de la promesa hecha a Abraham.

Podemos decir que el candelabro contiene los pasos a seguir hacia la tierra prometida.

Los profetas señalaron el candelabro como los ojos de Dios

Aquellos siete que son los ojos del Señor Dios que recorren toda la tierra. (Zac 4:10)

Estos siete brazos corresponden a los que cumplieron la palabra de Dios señalando el camino para aquellos que los siguen, siendo la lámpara la palabra de Dios.

Lámpara es a mis pies tu palabra, y luz a mi camino (Sal 119:105)

Tomando simbólicamente a Jerusalén como centro geográfico espiritual trazamos un mapa con brújula emocional con los puntos cardinales como referencia del camino hacia la tierra prometida, con el oriente como meta de las aspiraciones y el occidente como el ocaso de la luz divina.

El lado meridional representa la esclavitud de las cosas mágicas y la superchería.

Estos dos lados, el septentrional o Norte, y el meridional o Sur, representan los errores característicos del hombre.

El Norte representando la conducta fría, osada e indiferente producto de la soberbia humana al compararse con Dios, pensando estar arriba en su intelecto.

El sur, como la conducta superchera e inconsciente del hombre, creando falsos poderes imaginarios y fórmulas mágicas que piensa y hasta llega a creer le dan control sobre lo desconocido

Por eso, el pan de la proposición está en el lado septentrional, para mostrarle al hombre el alimento de dolores y sufrimientos que su osadía le produce.

Vemos que la lámpara está en el lado meridional, porque los ejemplos de la conducta divina muestran al hombre la forma de eliminar los falsos dioses alumbrando la verdad de la luz divina.

Estas dos actitudes pueden ampliarse considerablemente encerrando dentro de sus fronteras todos los derivados de las mismas.

Como ejemplo de conducta septentrional podemos señalar el amor al dinero y a la gloria, que son los resultados de esta conducta fría e indiferente que sirven para ocasionarle al hombre los dolores resultantes de su ignorancia y osadía, siendo estos los panes que éste propone a Dios en la mesa que propone.

Como ejemplo de conducta meridional, podemos señalar la confianza que el hombre deposita en los rituales en su forma puramente externa y literal que no conduce a nada y que sólo a través de las conductas de los hombres de Dios puede iluminarse la forma verdadera de la conducta encaminada a servir a Dios.

Así podemos asociar el norte y el sur, partiendo de la base de interpretación que señalamos de todas las conductas que definitivamente han de engrosar las filas de la ignorancia.

Esto debe subsanarse, ya sea por medio del alimento que se propone a Dios por medio de su mesa (simbólicamente la conducta del hombre) donde se señalan los dolores y sufrimientos que se producen por estas conductas, o por medio de la oscuridad que se proyecta al no obrar por medio de Sus luces que son los ojos del Señor Dios, o por las conductas encargadas de juzgar a las tribus de Israel, como vimos en uno de los caminos al respecto.
  • Y juzgará entre las naciones y reprenderá a muchos pueblos (Is 2:4)
Y no juzgará según la vista de los ojos, ni fallará según el oír de sus oídos… sino que con justicia juzgará a los desvalidos. (Is 11:3-4)

Así vemos estos dos elementos del Tabernáculo que se caracterizan por estar fuera del velo, pero que tienen las funciones más importantes para la entrada al lugar santísimo, ya que son la justicia y la sabiduría de Dios representadas por el candelabro, y la mesa respectivamente. Una hacia el lado septentrional, y otra hacia el lado meridional, como lo indica su posición simbólica con relación a las cosas del espíritu.

25.- Y ENCENDIÓ LAS LÁMPARAS DELANTE DEL SEÑOR DIOS, COMO EL SEÑOR DIOS HABÍA MANDADO A MOISÉS.-

Con esta acción se da a entender que Moisés fue el encargado de hacer notorios los ejemplos de las luces que la humanidad debe utilizar como guía de actuación.

Encender: simboliza el acto de iluminar, dar luz, hacer conocer estos espíritus de luz que las lámparas del templo representan.

En pasajes anteriores vimos el significado de los espíritus que daban su luz como lámparas ante Dios, siendo a la vez los ojos de Dios, ya que por medio de ellos se ve la justicia divina sobre los hombres.

¿Qué quiere decir: se ve la justicia divina?

Esto significa que las piezas de comparación que el hombre debe utilizar para seguir los pasos de los elegidos es tomar como ejemplo sus conductas, para por medio de ellas, juzgar las propias, rectificando las diferencias que puedan hallarse.

En cada estado de la conciencia humana el hombre tiene un ejemplo por el cual debe guiarse. Desde el grado más elemental, simbolizado por Noé como una de las lámparas del templo, por medio de su ejemplo de fe preservando la conducta animal o instintiva a pesar de los preceptos depuratorios de los grados de inconciencia original.

La generación de Noé se caracterizaba por falta de principios elementales de la razón de Dios. Estamos hablando en términos simbólicos por supuesto,

El primer ejemplo de fe elemental lo dio Noé al fabricar el arca, para permanecer como único concepto vigente después de la eliminación de todos los demás ejemplos quedando sólo las actitudes instintivas, simbolizadas por los animales de todas las especies que recogió en el Arca como símbolo metafórico. Noé representa la depuración del mal subsistiendo aislado.


Con esta acción podemos decir que Noé, con su fe de naturaleza elemental, fue la primera lámpara o espíritu que Dios colocó en el Tabernáculo como guía luminosa para las generaciones venideras.

Después vimos el segundo ejemplo de fe, que sin duda lo fue Abraham, con su fe inquebrantable. Luego le siguió Isaac como ejemplo de de por su sacrificio personal sin objeción. Jacob le siguió, simbolizado en su lucha contra la carne venciendo al hombre para convertirse en Israel.

Moisés simboliza la reforma de la conducta humana por medio de la ley, y es la luz reflejada de la conciencia mostrando la imagen de la luz por reflejo durante la oscuridad de la servidumbre a Egipto, reinado meridional en el sentido simbólico, ya que Egipto representa la esclavitud del hombre a sus pasiones carnales y la vida en los temores a lo desconocido. Josué simboliza las primeras luchas contra el intelecto humano simbolizado por el hombre que vive simbólicamente en la tierra del otro lado del Jordán.

Aquí podemos decir que se desarrolla la batalla ideológica del hombre en lucha contra su condición racional, ya que éste fabrica su torre intelectual para llegar al cielo y sentarse en el trono de Dios.

Por medio de este simbolismo podemos señalar la actitud sobrestimada del hombre pretendiendo ser superior a Su Creador.

Todos los intentos filosóficos por demostrar la creación del mundo como causa natural negando la existencia de Dios como causa inicial, surgen con este simbolismo.

Con Josué podemos ver las primeras luces literalmente. Luego lo podemos analizar simbólicamente para tomar las experiencias materiales como forma de alcanzar victorias espirituales.

Y por último vemos la batalla de David contra el gigante filisteo símbolo de la altura que parecen tener los razonamientos intelectuales del hombre representado por Goliat, el cual fue derrotado para después enfrentarse a la actitud externa de las religiones, simbolizado por Saúl, el cual fue elegido por su parecer elevado y hermoso. Después consolidó el reinado unificando todas las tendencias que buscan a Dios.

Estos siete ejemplos de luz, representan la lámpara del templo que Moisés encendió al alcanzar los mandamientos y colocarlos en el centro del Tabernáculo como figura mesiánica de los nuevos niveles una vez rebasadas las fronteras de la ley. Luego veremos como esta lámpara está siendo alimentado por siete tubos de aceite Mesiánico que la hace imperecedera.
  • Veo un candelabro de oro macizo, con un depósito arriba, con sus siete lámparas y siete tubos para las lámparas que están encima de él. Junto al candelabro hay dos olivos, el uno a la derecha del depósito y el otro a su izquierda (Zac 4:2-3)
El río Jordán simboliza la división entre los dos niveles, marcando la separación entre la ley y la gracia por medio del lavatorio de las aguas de su corriente antes de penetrar en la tierra prometida.

26.- LUEGO PUSO EL ALTAR DE ORO DENTRO DEL TABERNÁCULO DE REUNIÓN, DELANTE DEL VELO.-

Con la colocación del altar donde ha de quemarse el incienso de las conductas ejemplares de los hombres de Israel, se señalan las alturas que el hombre va escalando por medio de los ejemplos de fe que éste coloca en el Altar del holocausto.

Estos son los ejemplos de suave olor a santidad para Dios.

Todos estos elementos van delante del velo, dando a entender que son posiciones alcanzables dentro del grado al cual tiene acceso el hombre común que no ha alcanzado la preparación necesaria que tiene el sacerdote por haberse éste dedicado de lleno a la labor de encontrar a Dios y transmitir sus hallazgos al resto de la humanidad.

Cuando vemos que algo está colocado delante del velo, podemos entender que son simbolismos de cosas que están al alcance de la altura espiritual del hombre común que acude a una religión en busca de protección para sus temores con relación a lo desconocido. Esto es así para los fieles de las congregaciones religiosas, cualquiera que esta sea.

Los elementos que han de estar detrás del velo, sólo el sacerdote tiene acceso a ellos, y solamente una vez al año no sin antes otorgar sacrificios y depuraciones por él y por el pueblo, dando a entender con esto que es una condición reservada sólo para los verdaderamente esforzados en alcanzar las cosas de Dios, no sin antes pasar por las pruebas depuratorias y sacrificios que esto implica.

Hemos visto que la santificación del sacerdote tiene un carácter especial mucho más exigente que la de cualquiera del pueblo, señalando así lo difícil de esta posición, a la vez que lo gloriosa de la misma con relación a las cosas del espíritu.

Vimos el simbolismo del oro, señalado como lo seleccionado para representar las cosas de Dios por su esplendor y dureza, siendo el elemento específico que representa lo que simboliza a Dios en el orden material, como lo más apreciable.

27.- Y QUEMÓ SOBRE ÉL INCIENSO DE ESPECIAS AROMÁTICAS, COMO EL SEÑOR DIOS HABÍA MANDADO A MOISÉS.-

De esta manera se da inicio a la representación de las conductas de los idealistas de esta fe que Moisés resumió por medio de la fabricación del Tabernáculo como le había sido ordenado por Dios.

Vimos las especias aromáticas como los ejemplos de los idealistas de la fe en Dios que le dan el sabor grato a las cosas que aquí se presentan.

Por medio de ellos podemos ver los resultados que se van obteniendo a través de esas conductas maravillosas que representan el incienso de especias aromáticas.

Al quemar el incienso sobre el altar, deja asentado el inicio del proceso que ha de derivarse del simbolismo encerrado en el Tabernáculo de Reunión.

Esto es como una especie de iniciación, ya que vemos que las lámparas fueron encendidas delante del Altar y el incienso comienza a humear con grato olor a santidad delante del mismo.

También la mesa de la propiciación y la colocación de las tablas en el Arca están preparadas especialmente para esta función.

De esta forma queda en función las acciones del nuevo nivel o pacto que ha escenificarse en las escrituras. Los libros precedentes contienen elementos de perfeccionamiento de todos estos pasos.

Por medio de las leyes rituales que han de presentarse en estos nuevos libros, podremos ir interpretando las confrontaciones contra las tentaciones que el pecado va introduciendo, ya que a medida que el hombre avanza en el conocimiento del pecado, más grande y extenso se hace el mismo, mostrando sus delicadas relaciones con conductas que no se concebía que fueran negativas al hombre en niveles anteriores, pero que al ir descifrando las complicaciones que surgen por medio de las influencias de los hechos, al parecer sin importancia, se van haciendo visibles nuevos terrenos que no deben ser habitados.

Y cabe introducir el proverbio de "a mayor conocimiento, mayor es la ignorancia"

28.- LUEGO PUSO EN SU LUGAR LA CORTINA DE LA ENTRADA DE LA HABITACIÓN.-

Después de colocados los elementos representativos de los pasos a seguir con relación a alcanzar la tierra prometida (que simbólicamente está detrás del velo) Moisés procedió a marcar las fronteras con relación a cada uno de estos niveles.

Los velos señalan las incógnitas que hay que atravesar para llegar a las cosas profundas y verdaderamente importantes de lo que el Tabernáculo representa. Para llegar a esas incógnitas o velos, hay que primeramente alcanzar los grados de perfección que dan acceso a los mismos.

Como al pie del monte se hallaba la columna de nube a la cual los hijos de Israel tenían miedo acercarse por temor a ser destruidos, a este lugar llegan solamente los ancianos de la tribu y los sacerdotes.

Allí en la cima del monte se hallaba lo que era verdaderamente importante alcanzar para la realización de los planes que la humanidad tenia señalados.

Ahí solamente tuvo acceso Moisés para tener su encuentro con Dios.

De esta misma forma alegórica se presentan las cosas del Tabernáculo, donde vemos que al interior del mismo, sólo tiene entrada el sumo sacerdote una vez al año, señalando esta oportunidad como una ocasión especial, dando a entender con esto que no en todos los niveles se producen cambios dramáticos en la conciencia humana.

Así vemos que hay cambios intermedios en el camino hacia lo que se halla detrás del velo, por lo que es necesario ir atravesando las cortinas o experiencias negativas para primeramente entrar dentro de las cosas de Dios, Una vez dentro, acercarse al lugar santísimo y allí se hacen las ofrendas de paz que se colocarán delante del altar

Estos son metafóricamente los esfuerzos que hace el hombre que busca a Dios para cambiar su actitud y aprender las cosas que provienen del Altar, que como vimos es el camino hacia las alturas del espíritu. No es posible atravesar el velo para llegar al Arca donde se encuentran encerradas las cosas de la ley porque se corre el peligro de morir.

Esto quiere decir que el hombre necesita pasar por un proceso evolutivo antes de poder entrar en las cosas profundas del espíritu. De lo contrario sucede lo que comúnmente ocurre con todas las sectas que empiezan a hurgar en la vida del más allá encontrando solamente caminos de confusión, obteniendo filosofías supercheras y mil caminos, a los cuales llaman esotéricos que sólo los conduce a la pérdida del camino verdadero quedando encerrados en sus teorías desconcertantes que no soportan el análisis profundo de los que buscan a Dios por el camino de la luz, y no por los senderos de las sombras.

Estas cortinas son las experiencias que hay que atravesar. Andar las rutas de la conducta enmendando los errores que aparecen en el camino limpiando los arrastres mundanos con las aguas vivas de la fuente y su base que se encuentra a la puerta del Tabernáculo, para después atravesar la cortina que conduce al lugar de reunión, donde se tomará el pan de la proposición (el Verbo de Vida) y se verán los velos del Arca, gracias a la luz que irradia la lámpara de los siete brazos o espíritus que sostienen los ejemplos de los hombres santos de Dios, que, por medio de sus conductas ejemplares, sirven de jueces para mostrar al que busca la fe suprema los caminos seguros hacia el Arca que está detrás de todos los velos y que es la razón de todo este proceso.

29.- ASIMISMO PUSO EL ALTAR DEL HOLOCAUSTO A LA ENTRADA DE LA HABITACIÓN, ES DECIR DEL TABERNÁCULO DE REUNIÓN; Y OFRECIÓ SOBRE ÉL EL HOLOCAUSTO Y LA OFRENDA VEGETAL; COMO EL SEÑOR DIOS HABÍA MANDADO A MOISÉS.-

Con la colocación del altar del holocausto se reafirman las distintas conductas que han de presentarse como dedicación a ese ideal de perfección que el Arca del Pacto reclama.

Estas conductas son las rectificaciones de los errores que se cometan con relación a los mandamientos, ya que vemos que está colocada en el lugar de reunión y no en el lugar santísimo.

Es muy significativo el hecho de que todo lo que corresponde al culto de la ley esté fuera del velo. Con ello parece indicarse que una vez alcanzado el conocimiento de la ley, cesa el culto de la misma.

Pero no hay forma de estar exento de este paso, ya que el propio Moisés inicia el proceso ofreciendo su holocausto, y la ofrenda vegetal como dice en estos pasajes que como el Señor Dios le había mandado.

30.- LUEGO PUSO LA FUENTE ENTRE EL TABERNÁCULO DE REUNIÓN Y EL ALTAR Y ECHÓ ALLÍ AGUA PARA LAVAR.

Después de las primeras ofrendas en el Altar, una vez terminado éste, se comenzaron a acumular los principios depuratorios, que representaba el agua que se colocaba en la fuente, que aquí vemos que ya está colocada entre el Tabernáculo y el Altar. Esto señala las fronteras del Jordán (fuente de aguas vivas) con relación a la tierra prometida.

Éstas aguas simbolizan los lavatorios a que se hace alusión ha de hacer todo el que entra a la tierra santa. Estas son las aguas de salvación que calman la sed de justicia de los que buscan las palabras encerradas en el Arca del Pacto. Todo puro simbolismo y alegoría bíblica derramada en las escrituras como fuente de aguas vivas.

31.- Y SACANDO AGUA DE ELLA, MOISÉS Y AARÓN Y LOS HIJOS DE ÉSTE, SE LAVARON LAS MANOS Y LOS PIES.

El agua sirve para el lavatorio de las manos y los pies.
  • Las manos simbolizan la actuación de una persona, su forma de proceder.
  • Los pies representan los caminos que son necesario andar en la vida.
Al lavar sus manos y sus pies con las aguas de la fuente, simbólicamente están depurando todos los errores anteriores del camino y de aquello con lo que han tenido contacto en su existencia, para después entrar limpios a una nueva vida o nivel espiritual.

Para el hombre, con la fabricación formal del Tabernáculo, todo comienza nuevamente.

Hasta ese momento se han estado preparando las condiciones propicias para que el hombre comience su verdadera función con relación a la creación de Dios, donde al parecer éste tiene una condición especial con relación a las otras especies.

Desde ese momento, el hombre se manifiesta apto para manejar la facultad de la palabra de Vida, transmitiéndola, otorgándosele la oportunidad de trascender por medio de ella, replicando sus logros de generación a generación.

Con el lavatorio de las manos y pies se establece la eliminación de los grados anteriores, para proceder a iniciar la nueva vida al influjo de las leyes encerradas en el Arca del Pacto.

32.- SIEMPRE QUE ENTRABAN EN EL TABERNÁCULO DE REUNIÓN, Y SIEMPRE QUE SE ACERCABAN AL ALTAR, SE LAVABAN, COMO EL SEÑOR DIOS HABÍA MANDADO A MOISÉS.-

Cada nuevo nivel de actuación que se presenta como ofrenda a esta conducta ideal que aquí se presenta, necesita que primeramente se borre de toda impureza de los grados anteriores.

Al mismo tiempo, para evitar las contaminaciones de conceptos mundanos que puedan mezclarse con las cosas del Altar, mixtificando su santificación, debe depurarse todo otra forma de conducta que pueda alterar la búsqueda del ideal supremo.

Por eso vemos que no sólo una vez se especifica que hay que depurar los errores pasados y las contaminaciones del mundo, sino que constantemente se hace un recordatorio de los mismo como para dejar asentado la importancia que esto tiene.

Para entrar en una nueva concepción de las cosas hay que dejar atrás todo lo relacionado con lo anterior y buscar las nuevas alturas que Dios señala por medio de sus elegidos, en este caso, Moisés y Aarón con sus hijos.

Después deja establecido la misma obligación para todos los que le precedan en el acercamiento al Altar.

De esta forma se certifica la pureza de las cosas nuevas y se dice una vez más que esto se hizo conforme al mandato de Dios para con Moisés, ya que así fue el carácter establece y permanente de estas ordenanzas.

Cada vez que se dice que Moisés lo hizo conforme a las cosas que Dios le había mandado, se confirma este mandato como imprescindible para poder alcanzar los niveles anunciados en el Arca del Pacto.

Esta confirmación es la misma que se hace al pasar el Jordán, sólo que en la primera entrada, los hijos de Israel pasaron por el río sin entrar en las aguas, ya que las mismas se dividieron para dar paso al Arca del Pacto que entró en la tierra prometida sin pasar por el lavatorio de las aguas.

Estos simbolismos son muy importantes, ya que por medio de ellos se hacen profecías de índole simbólico que sólo pueden comprenderse por medio de los hechos que vana relatándose más tarde a través de las conductas y hechos del pueblo en los libros que siguen a los cinco primeros libros de la Biblia que se conocen como la Torah en hebreo.

Por eso aquí se especifica que siempre que se acerquen al Altar se lavaban como el Señor Dios lo había ordenado.

33.- FINALMENTE ERIGIÓ EL ATRIO ALREDEDOR DE LA HABITACIÓN Y DEL ALTAR; Y COLOCÓ EN SU LUGAR LA CORTINA DE LA PUERTA DEL ATRIO. DE ESTA SUERTE ACABÓ MOISÉS LA OBRA.-

En el atrio vemos simbólicamente los primeros pasos o entrada hacia el nuevo grado que se espera alcanzar.

Son las primeras seguridades que se ofrece y que adornan el nuevo ideal que ha de perseguirse.

Cuando una nueva forma de ver las cosas se presenta, es necesario que este nuevo ideal presente atractivos que le hagan deseable.

El atrio representa estas cualidades externas que a la vez le dan belleza, sirviendo para el propósito de darle mayor fortaleza y sentido de seguridad a la vista de los que lo admiran.

Podemos decir que las promesas de alcanzar la tierra prometida, anunciando que era una tierra que fluye leche y miel, representó el atrio de esta promesa, al igual que las promesas de vida eterna que se anuncian en las religiones resultan ser el atrio que atrae a algunos fieles, temerosos de la muerte como final de la existencia, de algo que los libere de esa carga..

Todos los predicadores, de alguna forma u otra, muestran el atrio de entrada de sus predicados. Pero es muy importante comprender que aquí esto es lo último que se presenta, donde todo lo demás está terminado y sólo se aguarda por las ofrendas de los fieles que han de irse presentando ante el Altar para dar sus holocaustos personales al mismo.

Con relación a los predicados del mundo, las obras comienzan por el atrio ya que los compromisos y obligaciones no son visibles a los ojos de los que acuden a su tabernáculo mundano donde la paga es mucho más dolorosa y al final no otorga lo que promete.

En este caso, primeramente el nivel que Moisés anunciaba como proveniente del Monte Sinaí, había sido recibido directamente de Dios.

Todos los pasos a seguir estaban establecidos y los primeros en cumplir con estos requisitos fueron precisamente Moisés y Aarón y sus hijos, que iniciaron la ejemplarización por medio de ellos, dejando sus luces y purificaciones (Urim y Tumim) para la posteridad y para todas las naciones de la tierra.

34.- Y ENTONCES LA NUBE CUBRIÓ EL TABERNÁCULO DE REUNIÓN, Y LA GLORIA DEL SEÑOR DIOS LLENÓ LA HABITACIÓN.-

La nube representa los conceptos renovantes que aún no se han comunicado al hombre, pero que aguardan su oportunidad para manifestarse.

En este pasaje se da a entender que estos pasos de evolución que el hombre tiene señalados para emprender estarán sujetos a rectificaciones futuras que han de ser lavadas por las aguas de esos componentes simbólicos que la nube señala y que en estos momentos forman una nebulosidad que enmascara la imagen futura de Dios.

¡La gloria del Señor Dios! representa la manifestación de todos los atributos que se le concede al hombre en los diferentes grados de entendimiento.

Cada nivel espiritual muestra una imagen de Dios diferente, mostrándose al hombre de una manera más magnificente a medida que se atraviesan las oscuridades de la razón elemental y se va lavando paulatinamente la visión respecto a las cosas del espíritu por medio de esta nube de incógnitas que cubre la imagen de las cosas divinas y que aquí se muestra como llenando todos los símbolos que el Tabernáculo de Reunión representa.

A medida que el hombre va teniendo conciencia de los fenómenos naturales que le rodea y va entendiendo los secretos de la naturaleza, éste va teniendo una percepción de los llamados misterios, eliminando velos y teniendo una imagen de las cosas de Dios cada vez más definida.

Esta es la nube que cubre el Tabernáculo donde reposa la grandiosidad de la imagen de Dios que puede verse con los ojos relativos de los que miran hacia el Tabernáculo.

Podemos decir que cada hombre tiene una imagen de lo que representa este Tabernáculo de acuerdo con su nivel intelectual así como del grado de fe que éste sustente.

No cabe duda que la imagen de Dios que se presentó en la etapa de Noé, no era similar a la que se presenta en Moisés. De igual manera los hombres de la etapa de Moisés, no tenían una imagen similar a la que tenían los profetas que contemplaban a Dios desde un ángulo más elevado que el que lo veían aquellos hombres anteriores a ellos.

De esta forma la imagen de Dios va cobrando un significado diferente y una visión más amplia e inimaginable, a medida que el hombre va adquiriendo nuevos grados de conciencia y conocimiento de los atributos de Dios, y las profundidades de la naturaleza y sus fenómenos..

35.- Y NO PUDO MOISÉS ENTRAR EN EL TABERNÁCULO DE REUNIÓN PORQUE LA NUBE DESCANSABA SOBRE ÉSTE Y LA GLORIA DEL SEÑOR DIOS LLENABA LA HABITACIÓN.-

Desde ese momento el alcance de Moisés estaba limitado, ya que él no era la fase final de lo que el Tabernáculo representaba.

Moisés representó un nivel espiritual señalado para transmitirle al pueblo de Israel las alturas de la ley; pero no tenía el alcance de las cosas de la gracia que se prometió a Abraham que se alcanzaría en la tierra prometida.

Estos pasajes son muy significativos para la corroboración del significado del Tabernáculo que representaba todo lo relacionado con los pasos a seguir para entrar a "la tierra prometida", donde Moisés no podía entrar, ya que sólo alcanzaría a verla desde lejos dejando el camino preparado para el profeta que le precedería de acuerdo con las escrituras en Det 18:15
  • El Señor Dios levantará para ti un profeta de en medio de ti, de tus hermanos, semejante a ti, a él oiréis.
En ese pasaje se define claramente la sucesión de Moisés, estipulada como de mayor altura espiritual, ya que se considera esta figura mesiánica, que allí se revela, como semejante a él, o sea de la condición especial de Moisés que mostró un nuevo pacto al pueblo siguiendo las ordenanzas de Dios.

Por eso ahora dice que Moisés no pudo entrar en el Tabernáculo porque su alcance se hallaba limitado por la nube que descansaba sobre éste, dando a entender que su capacidad no estaba a la altura de los mandamientos que Dios le había dado para que los transmitiera al pueblo mostrando un Tabernáculo con varias cortinas que limitaban el acceso al mismo de acuerdo con el nivel del que acudía en busca de Dios.

Además estaba el velo ocultando el lugar santísimo donde sólo podía penetrar el sumo sacerdote una vez al año, y no sin antes santificarse.

Cuando analizamos anteriormente esta situación vimos que los preparativos para cumplimentar esta función eran bien específicos con relación a la pureza del sacerdote y que lo limitaba a una vez en cada etapa.

Así podemos decir que el anuncio de la era mesiánica, estaba señalada para generaciones venideras, y que antes de eso se debía manifestar un nuevo concepto de perfección para el hombre que mostraría el nuevo nivel posterior a la promulgación de la ley. Como señalaron los profetas posteriormente, la ley desaparecería para dar paso a la gracia, y nadie más enseñaría a su prójimo, porque la ley estaría escrita en el corazón de los hombres para gloria de Dios.

36.- Y CUANDO SE ALZABA LA NUBE DE ENCIMA DE LA HABITACIÓN, LOS HIJOS DE ISRAEL LEVANTABAN EL CAMPAMENTO EN TODAS SUS JORNADAS.-

Alzarse la nube simboliza el momento en que se asciende un grado de conocimiento de las cosas de Dios coincidiendo con las jornadas que el pueblo de Israel (todo el que lucha con Dios) termina de recorrer una etapa de conocimientos.

Esta nube la vimos antes, durante el recorrido que hizo el pueblo a través del desierto y que lo fue dirigiendo hacia el destino que le tenía señalado.

Es la nebulosa en que yace todo lo relacionado con la idea de Dios que muestra su grandeza y esplendor detrás de una nube que protege su naturaleza divina de los ojos profanos y que se va revelando a aquellos que buscan Su presencia a través de la ruta que la nube va señalando.

Al igual que el pueblo de Israel siguió la ruta de la nube que le acompañaba en sus jornadas, de la misma manera los seguidores actuales de esos principios ideales tienen una nube ante sí indicándoles esa ruta que sólo los que por medio de la fe ven la gloria de Dios detrás de la misma llenando la habitación celestial. La misma gloria que se prometió al hombre por medio de Abraham y que ahora Moisés anuncia señalando que detrás de la nube está el Señor Dios mostrando la puerta hacia Sus recintos.

37.- PERO SI NO SE ALZABA LA NUBE, ENTONCES NO LEVANTABAN EL CAMPAMENTO HASTA EL DÍA EN QUE ELLA SE ALZABA.-

En la Biblia, las cosas se dicen una vez, y luego se reafirman nuevamente, tantas veces como Dios estima necesario para que el hombre lo comprenda a cabalidad.

Aquí vemos la confirmación de la nube que precede las cosas de Dios, y que si no se logra rebasar las nebulosidades de un grado, es imposible continuar la jornada hacia Sus predios.

Cada jornada es un período de tiempo que no tiene una duración específica con relación a las medidas del tiempo de Dios
Puede ser breve, o durar siglos antes que transcurra la misma.

Por eso al decir que si no se alzaba la nube no levantaban el campamento, nos da a entender que es necesario que el hombre pase por todas las experiencias necesarias de cada uno de los niveles del entendimiento, de manera que se haga una norma íntima la actuación señalada para cada nivel de la conciencia. De esta manera no se obra movido por el temor a una ley, sino iluminado por la esperanza que ofrece el reconocimiento de la misma de una manera absoluta.

38.- PORQUE LA NUBE DEL SEÑOR DIOS PERMANECÍA SOBRE LA HABITACIÓN DE DÍA, Y DE NOCHE HABÍA FUEGO EN LA NUBE, A LA VISTA DE TODA LA CASA DE ISRAEL, EN TODAS SUS JORNADAS.-

Durante los momentos de claridad la presencia de la nube era visible mostrando la nebulosidad que ocultaba la manifestación de Dios, siendo una muestra de su sapiencia en las enseñanzas que se encuentran descansando en el Arca del Tabernáculo, mostrando las jornadas a seguir hacia la tierra prometida.

Por la noche o sea, en los momentos de oscuridad del pensamiento humano, la nube se muestra como anunciando las tribulaciones y los padecimientos que son necesarios atravesar para llegar a la mañana para que el ardor de sus enseñanzas vuelva a mostrarse tras la nube que cubre el Tabernáculo.

Todas estas imágenes litúrgicas nos dejan comprender el significado simbólico de todos estos elementos que se nos muestran en este Tabernáculo que hasta el presente sólo se ha interpretado literalmente y se ha seguido los patrones de los niveles de la noche del entendimiento humano donde allí puede verse el fuego que encierra la nube, pero no puede observarse la gloria que se halla detrás de ella, toda vez que la luz de la mañana no se ha hecho en las mentes de los seguidores de la idea de Dios que, al igual que los hijos de Israel, temen acercarse al Tabernáculo por temor a ser destruidos.

Este libro del Éxodo marca, como su nombre indica, la travesía del hombre de su estado carnal pasional hasta su naturaleza racional y calculada por medio de la ley, lo cual aquí se señala cuando Moisés la recibiera de Dios en el monte Sinaí para transmitirla al resto de las naciones de la tierra como está señalado en la promesa de Abraham para las naciones del otro lado del Jordán.

Dios queda tras la nube que cubre el Tabernáculo esperando la llegada del nuevo día en el que el hombre cruce las aguas purificantes del Jordán, que son los conceptos depuratorios que dicha nube representa; para por fin entrar a la tierra prometida para que el alma del hombre repose bajo la luz maravillosa que Dios irradia.

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